El llamado es a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) para que verifique si hay permisos para explotación maderable sustentable y si se llevan a cabo progranas de reforestación y/o aplique las sanciones correspondientes y a la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), para que no autorice permisos -que se supone están suspendidos- para talar árboles en bosque de niebla y en áreas naturales protegidas, toda vez que este bosque es uno de los últimos “pulmones” con que cuenta la región.

El llamado es también a la sociedad civil y a los grupos ecológistas para no permitir más este tipo de atentados al entorno.